¡Cuidado con la ceniza del Popocatépetl!: Por qué la ceniza volcánica es peligrosa y cómo cuidarse
El pasado 22 de mayo, la Coordinación Nacional de Protección Civil de México cambió el semáforo de alerta volcánica del Popocatépetl de amarillo fase 2 a fase 3. Esto debido al aumento de la actividad del coloso, además de una mayor dispersión de ceniza en los estados al rededor del volcán.
La exposición a la ceniza del Popocatépetl puede tener una serie de efectos perjudiciales para tu salud. Estos efectos pueden variar dependiendo de la concentración y duración de la exposición. Sin embargo, puedes tomar medidas generales para evitar estragos en tu bienestar.
Sigue leyendo para aprender cómo cuidarte de la ceniza de volcán y cuáles son sus riesgos.
¿Qué es la ceniza volcánica?
La ceniza volcánica es un material fino y fragmentado que se produce durante una erupción volcánica. Al contrario de lo que se piensa, no se trata de simple polvo, ya que está compuesta principalmente por partículas de roca, cristales volcánicos y fragmentos de vidrio que son expulsados al aire por la actividad volcánica.
La ceniza de volcán puede viajar grandes distancias y afectar a áreas extensas, tanto cercanas como alejadas del volcán en erupción. Además de representar un peligro para el entorno natural y las infraestructuras, la ceniza volcánica también puede tener efectos significativos sobre la salud de las personas.
¿Cuáles son los efectos de la ceniza volcánica en la salud de las personas?
- Problemas respiratorios
- Irritación de los ojos
- Problemas en la piel
- Problemas cardiovasculares
- Problemas digestivos
Problemas respiratorios
La inhalación de ceniza volcánica puede irritar las vías respiratorias y los pulmones, lo que puede causar una serie de problemas respiratorios. Las partículas finas presentes en la ceniza, especialmente aquellas con un diámetro inferior a 2.5 micrómetros (PM2.5), pueden penetrar profundamente en los pulmones y desencadenar una respuesta inflamatoria.
Esto puede dar como resultado tos, dificultad para respirar, irritación de la garganta y nariz, y exacerbación de condiciones respiratorias preexistentes, como el asma y la bronquitis.
Irritación de los ojos
La ceniza volcánica puede causar irritación y molestias en los ojos. Las partículas pequeñas presentes en la ceniza pueden entrar en contacto con los ojos y provocar enrojecimiento, picazón, sensación de cuerpo extraño y lagrimeo. En casos más graves, la exposición prolongada puede ocasionar inflamación y conjuntivitis.
Problemas en la piel
El contacto directo con la ceniza volcánica puede causar irritación en la piel. Las partículas abrasivas presentes en la ceniza pueden provocar sequedad, enrojecimiento y picazón en la piel expuesta. Además, algunas personas pueden experimentar dermatitis de contacto, una reacción alérgica caracterizada por la inflamación y el enrojecimiento de la piel.
Problemas cardiovasculares
La exposición a largo plazo a partículas finas, como las presentes en la ceniza volcánica, ha sido asociada con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares. Las partículas finas pueden ingresar al torrente sanguíneo a través de la inhalación y desencadenar respuestas inflamatorias en el sistema cardiovascular.
Esto puede aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas, incluyendo ataques cardíacos, trombosis, embolias y arritmias.
Problemas digestivos
Si se ingiere ceniza volcánica, accidentalmente o no, ya sea a través de alimentos o agua contaminados, puede causarte malestar estomacal, náuseas y vómitos. Este material contiene una variedad de compuestos químicos y minerales que pueden irritar el sistema digestivo y provocar trastornos gastrointestinales.
¿Qué debo hacer en caso de caída de ceniza del Popocatépetl?
- Mantente informado. Mantente atento a los informes y advertencias emitidos por las autoridades locales y los organismos encargados de monitorear la actividad volcánica. Sigue las instrucciones proporcionadas y prepárate para tomar medidas rápidas en caso de una erupción volcánica.
- Permanece en el interior. Durante una erupción volcánica, es aconsejable permanecer en el interior de los edificios tanto como sea posible. Cierra las ventanas y puertas para evitar la entrada de ceniza y utiliza sistemas de filtración de aire si están disponibles.
- Evita la exposición directa. Si necesitas salir al exterior, usa una mascarilla facial adecuada, preferiblemente con un filtro de partículas finas (N95 o equivalente), para evitar la inhalación de ceniza. Además, cubre tu piel expuesta con ropa de manga larga, pantalones largos y utiliza gafas de protección y guantes.
- Lava tus pertenencias. Lava tu cuerpo y ropa expuesta a la ceniza tan pronto como sea posible. Usa agua tibia y jabón suave para lavar tu piel, y lava la ropa por separado de otras prendas para evitar la contaminación cruzada.
- Protege tus ojos. Si experimentas irritación ocular debido a la exposición a la ceniza del Popocatépetl, enjuaga tus ojos con agua limpia y evita frotarlos. Utiliza gafas de protección o gafas de sol para reducir la exposición directa.
- Mantén la calidad del aire en interiores. Si la calidad del aire en interiores se ve afectada por la presencia de ceniza volcánica, puedes usar purificadores de aire o acondicionadores de aire con filtros de partículas para reducir la concentración de partículas en el ambiente.
- Evita conducir en condiciones de ceniza. La ceniza volcánica puede afectar la visibilidad y hacer que las carreteras se vuelvan resbaladizas. Si es posible, evita conducir en áreas afectadas por la ceniza y sigue las instrucciones de las autoridades locales.
Cómo protegerte en caso de tener que salir de casa durante la caída de ceniza
Si te ves en la necesidad de salir al exterior durante la caída de ceniza volcánica, es importante que tomes precauciones adicionales para protegerte. Algunas medidas que puedes tomar para minimizar la exposición a la ceniza y reducir los riesgos para tu salud son:
- Usa un cubrebocas adecuado. Utiliza un cubrebocas que esté diseñado para filtrar partículas finas, como los cubrebocas N95 o equivalente. Asegúrate de que el cubrebocas esté bien ajustado y cubra tanto la boca como la nariz. Esto ayudará a reducir la inhalación directa de la ceniza volcánica.
- Viste ropa protectora. Cubre tu piel expuesta con ropa de manga larga, pantalones largos y usa guantes. Esto ayudará a prevenir la irritación de la piel causada por el contacto directo con la ceniza.
- Protege tus ojos. Utiliza gafas de protección o gafas de sol envolventes para proteger tus ojos de la ceniza volcánica. Esto evitará la irritación y reducirá el riesgo de lesiones oculares.
- Evita tocar tu cara. Evita tocarte la cara mientras estés al aire libre. Las partículas de ceniza pueden adherirse a tus manos y, si te tocas la cara, pueden entrar en contacto con tus ojos, boca o nariz.
- Minimiza el tiempo de exposición. Si es posible, limita el tiempo que pasas al aire libre durante la caída de ceniza volcánica. Intenta realizar tus actividades al aire libre en momentos en que la ceniza sea menos intensa o busca áreas cubiertas donde la exposición sea menor.
- Limpia las superficies antes de tocarlas. Si necesitas tocar superficies exteriores, como vehículos o muebles, intenta limpiar la ceniza primero. Usa un paño húmedo o una esponja para eliminar la ceniza antes de tocar las superficies, ya que esto reducirá la posibilidad de que las partículas de ceniza se dispersen en el aire.
- Lava la ropa y el equipo utilizado. Después de estar al aire libre, asegúrate de lavar tu ropa y cualquier equipo utilizado, como mascarillas o gafas de protección. Lávalos por separado de otras prendas para evitar la contaminación cruzada.
Al tomar medidas preventivas adecuadas, puedes reducir el riesgo de problemas de salud asociados con la ceniza del Popocatépetl. Te invitamos a permanecer atento a las indicaciones de las autoridades y actuar para salvaguardar tu bienestar y el de tus seres queridos.
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